Cuidado de los Pies
Diferenciamos el cuidado de todos los días, el correspondiente al infantil y el diabético.
Lavado, secado e hidratación
- Lavar con agua tibia y jabón neutro.
- Secado minucioso, especialmente entre los dedos.
- Hidratación utilizando crema con urea.
- Inspección de piel y uñas.
- Corte de uñas en recto o con una lima.
- Calcetín limpio a diario y de algodón.
- Control de la sudoración.
Calzado
- Cómodo, flexible, acordonado o con velcro, de piel, con puntera amplia y tacón de 2-3 cm para el hombre y 3-4 cm para la mujer, y adecuado a la longitud de nuestro pie.
- Cuidar su limpieza y desgaste interior.
- Se recomienda un cambio diario, rotación.
El Pie del Niño
- Tenerlo en cuenta durante todo su crecimiento, para así poder prevenir y/o tratar las patologías que se presenten durante su desarrollo.
- Las anomalías infantiles afectan el desarrollo psicomotor del niño. El Podólogo Infantil puede despejar dudas al respecto.
- Es fundamental un buen calzado para su perfecto progreso de crecimiento natural, así como vigilar las posturas al dormir o al sentarse.
- Imprescindible atender las uñas y la piel del niño para así prevenir infecciones y otras alteraciones frecuentes.
- El calzado infantil es un importante factor a tener en cuenta.
Cuidados del Pie Diabético
Damos tratamiento al pie diabético. Para este caso recomendamos una práctica que incluya:
- No caminar descalzo, ni siquiera en casa.
- Evitar el calor directo para calentarlos.
- No usar nunca sustancias irritantes como callicidas.
- Examinarlos diariamente buscando lesiones que pueden pasar inadvertidas: hongos, grietas, durezas. Si la agudeza visual y/o la movilidad no son buenas, ayudarse con un espejo.
- Usar calcetines y calzado sin costuras, para evitar lesiones.
- No ponerlos en remojo, y no más de 37ºC el agua, secarlos muy bien y no usar crema entre los dedos.
- No manipular las lesiones o heridas. Estas deben ser tratadas por un podólogo.
REVISIÓN Y CUIDADOS